Un despertar diferente

Por Leonel Iparraguirre González

El de este 20 de octubre, les confieso que fue un despertar diferente en la ciudad de Morón. A las seis de la mañana, aún sin salir el sol, se escucharon los tres cantíos que a esa hora suele hacer el símbolo de la localidad, me refiero al Gallo de Morón.

En ese instante un coro de voces entonó el Himno Nacional en el parque José Martí de la ciudad. Era el primer homenaje de este pueblo al Día de la Cultura Cubana. A esa hora, miembros del grupo de Artes Plásticas Árbol Nuevo, emprendió el montaje de cuadros gigantes con los rostros de los Cinco Héroes Prisioneros del Imperio, dispersos por esa instalación.

Iniciaba así una actividad especial organizada por la Dirección Municipal de Cultura y la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba en el territorio por la fecha. Ya al filo de las ocho de la mañana se desarrollaba un acto político cultural para evocar la fecha del 20 de octubre, proclamado desde 1980 como Día de la Cultura Cubana.

Resultó realmente muy emotiva la celebración. Fue escenario propicio para que Héctor Izquierdo, destacado investigador e historiador de la localidad explicará al numeroso público presente la trascendencia de la fecha, cuando en 1868, se entona por vez primera las notas del Himno Nacional.

Las emociones fueron sucesivas. Se produjo entonces otro momento de particular impacto, como fue la graduación de doce jóvenes egresados de la Escuela de Instructores de Artes, los que firmaron el código de ética y dieron a conocer sus compromisos como nuevos soldados de la cultura.

Interpretaciones musicales, poemas, trovadores y un concierto de la Banda de Música de Morón con un recital de inmortales melodías cubanas dieron otro acento a la patriótica actividad. Al término de la jornada se efectuó un pasacalle, cuando integrantes de la Compañía De Morón Teatro, recorrieron parte de la calle Martí, arteria principal de la ciudad de Morón, como expresión de auténtica cubanía y la disposición de los trabajadores de Cultura de mantener latente un objetivo supremo: SEGUIMOS EN COMBATE.