Juicio contra Posada Carriles entre dudas y confusiones

.Parte de la sesión a puertas cerradas sin explicaciones

El juicio que se sigue en El Paso, Texas, contra el connotado terrorista Luís Posada Carriles, transita por momentos que provocan confusiones en el plenario, pues tras  las interrupciones de dos días, al reanudarse tuvo interferencias y situaciones dudosas.

Según los comentarios que circularon en El Paso, la interferencia se produjo por materiales clasificados, pues una vez reanudada la sesión tampoco se hizo comentario al respecto.

Llamó la atención que el acusado sea un ex agente de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), se hable de documentos archivados y, por segunda vez desde el inicio de la audiencia el 10 de enero, se actúe a puertas cerradas y los abogados presenten mociones selladas.

La prensa local se mostró alarmada por las incidencias en el procesamiento al terrorista de origen cubano por un tribunal federal pues se especula entre los reporteros que cubren el juicio, sobre una segunda sesión a puertas cerradas.

Según  informes de prensa durante una hora todas las personas, incluida prensa, agentes y acusado, fueron obligados a abandonar la sala ante una petición de los abogados para dialogar con la jueza, Kathleen Cardone.

De esta manera las sucesivas interrupciones  marcan un  proceso con dos veces puertas cerradas, dos suspensiones en dos días y va por la quinta ocasión que se pospone la audiencia por razones diversas.

No olvidemos que al inicio del juicio se anunció que el mismo podría extenderse de seis a ocho semanas y la actual es la octava. La prórroga más larga obedeció a la duda de la jueza si continuar el proceso o lo dejaba ahí.

Lo peor es que Posada Carriles no es enjuiciado por ser el organizador de una larga sucesión de actos terroristas contra Cuba, sino por mentir al solicitar asilo político en Estados Unidos en 2005.